Usbek,
la fiesta sí
La de la movilidad social, la del pibe que en la escuela pública recibía la netbook de conectar igualdad. Imperdonable. La de quienes tenían a su primera generación en la universidad pública (de las 13 que se abrieron). La de los más de 1000 investigadores e investigadoras que regresaron al país. La de la soberanía satelital en curso. La de las trabajadoras de casas de familia, registradas, con aportes. La de la inclusión. La de los planes de vacunación con la incorporación de 19 nuevas vacunas. La de la política exterior señalando Malvinas como objetivo fundamental. La de los Derechos Humanos como política de Estado. La de la apertura de Tecnópolis y el Centro Cultura Néstor Kirchner para poner la cultura y la tecnología en el lugar que deben tener. La de la escolarización, vacunación y documentación como base imprescindible para la Asignación Universal por Hijo. Todo eso fue la fiesta, señor Frigerio? por caso no fue fiesta la que levantaron con la pala los grandes capitales?
Uzbek se vio obligado a huir de su país. "Las leyes de China –escribe Montesquieu haciéndole decir a Usbek, eludiendo hablar así de las de Francia– mandan que quien falte el respeto debido al emperador sea castigado con la muerte. Como no definen en qué consiste esa falta, cualquier cosa puede dar pretexto para quitarle la vida a una persona a quien se tenga mala voluntad, y para exterminar a una familia entera" Cualquier parecido con la realidad no es casualidad
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